- El detenido causó lesiones en la mano al conductor y huyó del lugar tras haber fracturado una de las ventanas del autobús
- Fue localizado sobre las 8:00 horas del domingo en las inmediaciones de la localidad de Pina de Ebro
- Le constaba una orden internacional de búsqueda y detención para extradición y ha sido trasladado en la madrugada de hoy a la Audiencia Nacional en Madrid
7 de noviembre de 2016. A las 22:00 horas del sábado día 5 de noviembre el conductor de un autobús que realizaba trayecto entre Barcelona-Zaragoza, dio aviso a la Guardia Civil de Zaragoza con motivo de haber sido agredido por un pasajero extranjero mientras iba en ruta, a la altura del peaje de Pina de Ebro (kilómetro 41 de la AP-2)
Según informaba el conductor, éste pasajero se había mostrado agresivo durante el trayecto y en un momento dado se acercó a él y le agredió causándole lesiones en la mano izquierda, al mismo tiempo que fracturó una de las ventanillas del autobús y huyó del lugar campo a través.
Tras recibir el aviso la Guardia Civil estableció un dispositivo de búsqueda para la localización del autor de los hechos, en el que intervinieron 4 patrullas de seguridad ciudadana, 2 patrullas de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia (USECIC) y efectivos del Servicio Cinológico con perro de búsqueda de personas.
El conductor del autobús fue atendido “in situ” por personal sanitario por la lesión sufrida y necesitó puntos de sutura en la mano izquierda. Los pasajeros esperaron en el lugar de los hechos para realizar un trasbordo a otro autobús que continuó ruta hasta Zaragoza capital.
Pasadas las 8:00 de la mañana del domingo, una patrulla de la Guardia Civil localizó al sospechoso cuando iba andando por la A-1107 en las proximidades de la localidad de Pina de Ebro. Esta persona presentaba síntomas leves de hipotermia y fue trasladado, en calidad de detenido, a dependencias oficiales de la mencionada población, donde se le facilitó ropa de abrigo y comida y fue atendido por personal médico.
Tras las gestiones realizadas la Guardia Civil comprobó que al detenido, L. K., un hombre de nacionalidad checa de 40 años, al que se le imputa un presunto delito de lesiones, le constaba una orden internacional de búsqueda y detención para extradición, no constándole antecedentes policiales en España.
El detenido ha sido trasladado por la Guardia Civil en la madrugada de hoy a la Audiencia Nacional donde quedará a disposición por la requisitoria que le constaba.
